lunes, 9 de abril de 2012

SOMOS LO QUE PENSAMOS


     Para el  Dr.  Nelson Torres Jiménez  (neurolinguista) "nuestras ondas cerebrales están reguladas por la actividad electromágnética" por lo que si pienso mal (con rabia, miedo, culpa, desesperanza) segrego sustancias en mi cuerpo, como la adrenalina y la mixtalina, que activan la onda BETA (de color negro y marrón). Si, por el contrario, pienso  con alegría, éxito, amor, gratitud... segrego endorfinas, sustancia que activa la onda ALFA (de color blanco y amarillo) ésta última es la que se conoce como  "el AURA".


    Al tratarse de ondas electromagnéticas son fácilmente  identificables con aparatos adecuados lo que hace el asunto verificable científicamente. Es decir,  según como sea nuestra forma de pensar así será lo que reflejemos dentro de nosotros mismos. Con los pensamientos caóticos, de corte pesimista y negativos, estaremos, afectándonos a nosotros mismos y después el ambiente que nos rodea. 


     De ahora en adelante tendrás que tener cuidado, porque sabes que si piensas con odio hacia una persona, estarás liberando sustancias  tóxicas que te afectarán. No quiere decir que la adrenalina (boca seca) sea del todo negativa para el organismo ya que esta sustancia la necesitamos cuando queremos salir del peligro. Lo que resulta dañino es el exceso de ella en el cuerpo. Así mismo pasa con la mixtalina que es una mezcla de sustancia varias que el organismo libera cuando estamos tristes y desesperanzados ( boca amarga). El cuerpo las segrega como forma de regulación pero si pasamos la mayor pare de nuestras vida de esta manera el organismo se sobre satura y terminamos enfermos. 


     Afortunadamente para nosotros los humanos, las endorfinas (saliva dulce) provocan  sensación de bienestar y relajación, sus abundancia en el cuerpo nos muestran una forma grata de ver la vida de manera positiva, ayudan a combatir  los virus y las bacterias y  se destacan  en su papel de equilibrar el tono vital y la depresión. Si la forma de pensar y vivir  es positiva y alegre vendrá como consecuencia un rejuvenecimiento de la persona que tendrá más motivación para vivir y esto repercutirá lógicamente en su entorno social. De seguro te lo harán saber con alegría, asombro y alago.  


     Te das cuenta, amigo lector,  tu forma de pensar influye directamente en tu forma de ser. Entonces, vivir mejor y vivir más implica también un aprendizaje y un cambio de mentalidad. Y, por supuesto,  implica una decisión de vida, que te incluye sólo a ti. Tú y nadie más que tú puedes decidir qué camino tomar.  Pensar caóticamente o de manera positiva.  Tú tienes el poder de pensar en ALFA para  segregar en tu cuerpo las sustancias  de vida  y  alegría  y  generar a tu alrededor un ambiente  en armonía .







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